Me deshice - UN DOING
Todo lo que no soy, todo lo que alguna vez fui y ya no y todo lo que nunca fui y quería encajar a la fuerza.
Con este escrito lleno de amor y compasión que me escribí y que te invito a que te dediques; te doy la bienvenida al 2024. Una de las palabras que descubrí en 2022 y quise llevar a mis días y a mi cuerpo en 2023 fue la palabra “Un-Doing” que se traduce a “Deshacer” .
Uf…esta palabra que estaba empolvada en mi vocabulario y encontré en mis clases de Alexander Technique me (como dicen en México) dio en el clavo. Tocó el punto clave y supe que era justo lo que necesitaba.
Me di cuenta que no tenía que hacer más, no tenía que poner más.
Parece obvio porque nadie intencionalmente quiere ponerse más presión o estrés, pero hasta que realmente comenzamos a deshacer y soltar lo innecesario, nos damos cuenta que el peso que veníamos cargando era mucho.
Qué pasaría si en vez de ponernos el hábito de hacer algo, hacer más de algo o sumarle a nuestra agenda y enfocarnos en la “fuerza de voluntad” y el “keep going” … nos enfocamos en deshacer, así, sin sumar.
Es incluso incómodo, porque vivimos en un entorno donde la narrativa nos obliga a perseguir objetivos, a vivir “al límite” y a llenar cada minuto de nuestra agenda para tener el derecho a descansar.
Estoy segura que todos tenemos por lo menos una cosa, un hábito, un juicio que podemos deshacer y eso abrirá espacio para la paz, para que la tensión, la auto exigencia y el estrés se disuelva.
Des-hacer. Un-doing tiene el mismo valor que cualquier otro verbo, que cualquier otro hábito. Y como cualquier hábito, la clave está en comprometernos a dedicarle tiempo a dejar de hacer.
2023 fue el primer año de los 22 que tengo en el que me regalé momentos en mis días de permitirme deshacerme física y energéticamente.
Deshacer todo lo que no soy, todo lo que alguna vez fui y ya no y todo lo que nunca fui y quería encajar a la fuerza.
Y eso, me suavizó, me abrió a relaciones más honestas, intencionales, a reconocer mis sueños verdaderos y a sentir en mi cuerpo paz y al momento de viajar me permite tener flexibilidad y momentos de recarga para poder ser mi mejor versión. Mi versión más compasiva y amorosa.
Just give me a little more time!/ Denme un poco más de tiempo.
Me di cuenta que soy un ser que tarda más en florecer.
Cuando me propongo desarrollar alguna habilidad o llegar a cumplir alguna meta; requiere de más paciencia y tiempo conmigo misma. Hace un tiempo creía que esto de pedir más tiempo para lograr algo significaba que había algo mal conmigo. Pero al permitirme deshacerme e ir lento, me hizo dar cuenta que no es que hay algo malo conmigo pues florezco, pero a mi tiempo.
El sistema nos obliga a que todos debemos dar resultados al mismo tiempo y aunque por un lado el desarrollar carácter, disciplina y responsabilidad es buenísimo; el compararnos, forzarnos y deshonrar nuestra individualidad y nuestros ciclos es cruel.
Soy un ser suave y lento
Y 2023 fue el primer año que me permitió nutrir las áreas de mi vida y cumplir metas honestas a MI tiempo, escuchando mi corazón.
“I want to love the things
as no one has thought to love them” / “Quiero amar las cosas como nadie ha pensado amarlos”
Leí esta frase que resonó porque eso quiero yo, por eso me enfoco tanto en seguir mi curiosidad y encontrar la magia en lo ordinario. Y eso implica deshacer juicios, deshacer agendas, deshacer tensión corporal.
Te dejo con este otro poema que escribí en el que se puede encapsular la esencia de esta carta.
Love
Clau ♡
Qué hermoso eso de florecer a nuestro propio ritmo. No es rápido ni es lento, es nuestro.
Y qué retador resulta a veces encontrarlo y sentarse en él. Puedo afirmar que esa ha sido en gran parte la fuente del sufrimiento que he experimentado; no haber respetado mis ritmos, no por desamor si no por la ignorancia acerca de su existencia.
Joven y sabia, Clau♥️
es pate de ser uno con uno