Antes de que sigas leyendo, te invito a que traigas en mente a 5 personas que amas mucho.
1…
2…
3…
4…
5…
¡Super!
¿En qué número te nombraste a ti?
¿Siquiera estabas en esa lista?
La primera vez que me preguntaron eso en una clase de Yoga, yo no estaba en esa lista. Recuerdo que una sensación de escalofríos llegó a mi piel y mis ojos se humedecieron.
El no haberme puesto en esa lista y ni siquiera contemplarme, me hizo tener flashbacks de esas veces en las que he puesto a otras personas antes que a mi.
Es una práctica diaria el recordar que:
nosotros debemos ocupar el lugar N.1 en esa lista.
Antes que nadie. Sin excusas.Sin dudarlo.
En el último par de semanas, la vida me ha puesto en situaciones que me han llevado a reflexionar sobre mi valor, sobre el valor innato que cada uno de nosotros posee.
La vida me lo puso tan claro, al susurrarme la frase:
“CHOOSE PEOPLE WHO CHOOSE YOU”➳ “ELIGE A PERSONAS QUE TE ELIJAN”
Agradezco la impresión agridulce que esta pequeña oración deja en mi.
Siento paz y confianza cuando me pongo a pensar en los espacios, los lugares y las relaciones (de todo tipo) en donde me valoran, donde puedo dar y recibir.
Por otro lado, el rechazo duele por las expectativas naturales que se sembraron en mi.
En una sociedad que nos dice “No tengas expectativas”, la culpa por tenerlas puede llegar, pero hago Key Change (cambio clave).
Tener expectativas no es malo. Es de hecho lo que nos mueve al buscar, dar y luchar por alguien o alguna situación.
Tampoco el rechazo es malo.
No es malo si te mueves de ahí.
Si te quedas y te aferras, puedes salir muy lastimada. Pero el rechazo es solo un susurro que dice “Por ahora, este no es el camino”
Es un gentil recordatorio de recordar tu valor.
Repite conmigo el siguiente texto que escribí hace unos días en una de esas tardes semiamargas en las que me di cuenta que donde yo estaba dando, no estaba siendo correspondida.
No me la voy a complicar. Mi valor no es algo que hay que negociar. Ni sube, ni baja Es independiente de lo que haga. No me la voy a complicar. Si el agua se estanca, fluirá en algún otro lugar. Por amor me escojo. -CQF
Por otro lado, no quiero que esto se malinterprete: “Cierra el corazón” “No te arriesgues” “Espera a que te busquen”.
☞Arriesgarse vale la pena, entregar el corazón, dar desde el amor y abrirse a la vulnerabilidad es lo más valiente y lindo que podemos hacer por alguien.
Por eso hay que hacer un constante check in en las relaciones asegurándonos que la balanza esté bailando sin irse a extremos, que el río del amor y la entrega siempre esté fluyendo.
Que sea mutuo, que a quien escojas, también te escoja.
El apego por miedo a quedarnos solos o a que no llegue nadie más viene desde el miedo, porque el corazón, nuestra alma y nuestra naturaleza saben que es mejor dejar de nutrir lo que no nos da fruto y crear la tierra fértil para lo que sí y tener el espacio para cuando llegue.
Eso es estar abierto a la vida.
Con todo esto pasando, esta pieza de poesía de Tess Guinery de uno de los libros que más atesoro, llegó a mi hoy, lo comparto contigo.
(la traducción viene abajo de la foto)
“Su corazón de arcilla
un millón de piezas
esparcido sobre la tierra polvorienta.
Respiró hondo, y con todo el oro, las estrellas y la fe que tenía, se coronó como la completamente inexperta y puso su esperanza en otra.
Esto-una especie de radical”
-Tess Guinery
Deseo que te sientas pleno y que habites situaciones y relaciones que también quieran habitarte. Que todo se encuentre fluyendo, y si no es así, que tomes la inspiración y el valor de ponerte primero a ti. Lo vales.
Love,
Clau ♡